La gran mentira de las finanzas es “Invertir no es para todo el mundo”. Todo ser humano lleva un inversor dentro con la aspiración de progresar y prosperar económicamente a lo largo de su vida. Hasta aquel que juega la lotería es un inversor en potencia, ya que utiliza o invierte una cantidad de dinero, con la esperanza de que la bienaventurada suerte lo recompense y le haga multiplicar miles de veces su capital.
Sin embargo, un buen inversor es aquel que tiene una estrategia y un método. Una buena estrategia acompañada del conocimiento necesario, ayuda a que una inversión sea rentable con el paso del tiempo. Es por ello que invertir resulta fundamental para tener mayores garantías de nuestro bienestar en un futuro.
En primer término, para invertir, un capital es necesario, por lo que un ahorro debe siempre preceder a la inversión. Mientras ahorramos, debemos empezar o seguir formándonos, con la premisa de optimizar siempre nuestra estrategia.
En INVERLIGENTES promovemos la educación financiera, secundada siempre por una estrategia de inversión adaptada a cada perfil de inversor. Nuestro objetivo es ayudar a nuestros clientes a perfilar una estrategia de inversión y un método, para posteriormente llevarla a cabo juntos, acompañándolos en el proceso.
¿Qué tipo de inversión llevar a cabo? ¿Con qué plazo? ¿Y con qué tipo de riesgo? ¿Cuáles son las estrategias de inversión que me convienen? ¿Cómo puedo empezar? Necesito optimizar mi estrategia de inversión, ¿qué debo hacer? Quiero invertir a 0 riesgo, ¿dónde lo puedo hacer?
Si estás buscando estas respuestas, desde INVERLIGENTES te ayudamos a comprender mejor todas las estrategias de inversión y cual se adapta mejor a ti para que puedas desarrollar tu propio método de trabajo para desarrollar estas estrategias rentables y sostenibles en el tiempo.
Invertir y rentabilidad son dos polos que se atraen. En el primero de ellos, hay un flujo de salida de capital de nuestra cartera, mientras que el segundo de ellos lo que se produce es la entrada de capital a esta a modo de recompensa.
Existen multitud de formas diferentes de obtener buenas rentabilidades en un mundo tan globalizado como el actual. En este artículo, se van a exponer estrategias e intereses anualizados que han sido obtenidos por INVERLIGENTES S.L, a modo orientativo.
En este caso, las estrategias rentables de inversión en las que nos vamos a centrar se encuentran dentro del mercado de criptomonedas. Cabe destacar que el mercado cripto, es en la actualidad un mercado en auge, y que por tanto permite obtener beneficios que en muchos casos son impensables en otros mercados minimizando el riesgo.
Dentro de las estrategias de inversión, deben considerarse fundamentalmente 3 tipos, en función del intervalo temporal en el que se espere la rentabilidad:
Estrategias a corto plazo: Aquellas en las que se plantea cerrar la operación en máximo 1 año. En estos casos, pueden existir operaciones que duren días, e incluso horas. Estas operaciones tienen un riesgo mayor, ya que suelen ser aquellas en las que las fluctuaciones del mercado están muy presentes. La rentabilidad esperada, puede oscilar en torno el 150% anual.
Esto es, con un capital de 10.000€ invertido el 1 enero de 2021, el 31 diciembre 2021 hubiese conseguido 25.000€.
Estrategias a medio plazo: Aquellas en las que las operaciones suelen estar abiertas entre 1-5 años. En estos casos los activos se encuentran también sujetos a movimientos del mercado, sin embargo plantear una estrategia de inversión a años vista, ayuda a amortiguar las posibles caídas y pérdidas en el valor de los activos. La rentabilidad esperada, puede oscilar en torno el 70% anual.
Esto es, con un capital de 10.000€ invertido el 1 enero de 2021, el 31 diciembre 2022 hubiese conseguido 28.900€.
Estrategias a largo plazo: Aquellas en las que las operaciones suelen estar abiertas más de 5 años. Por lo general, se dice que invertir a largo plazo es más seguro, ya que los mercados suelen tener tendencias de crecimiento positivas con el paso de los años, y por tanto las posibles recesiones interanuales son compensadas con la tendencia. La rentabilidad esperada, puede oscilar en torno el 25% anual en función de los activos.
Esto es, con un capital de 10.000€ invertido el 1 enero de 2021, el 31 diciembre 2025 hubiese conseguido 30.500€.
En todos los casos anteriores, se debe llevar a cabo un estudio de los activos y del mercado en el momento de la apertura de la operación, así como la pérdida que estamos dispuestos a asumir, y la temporalidad de la inversión.
Algunos ejemplos de estrategas de inversión para obtener las rentabilidades reseñadas anteriormente pueden ser entradas a ventas y subastas privadas de lanzamiento de nuevas criptomonedas y/o proyectos cripto, staking, liquid swap…
